Dorada con patatas
No hay nada mejor que unas patatas panadera para acompañar un pescado, una carne, o cualquier cosa. Esta receta se puede hacer con la dorada ya fileteada, pero resulta muy fácil hornearla entera, así que suelo ponerla entera y luego ya la parto.
Lo ideal es poder hacerlo con dorada salvaje, pero me temo que no va a resulta ni fácil ni barato encontrarla en muchos lugares, así que tendremos que conformarnos con lo que encontremos.
Lo que si te puedo decir, es que tan pronto como empieces a oler el olor de la dorada, el de las patatas asándose y el aceite de oliva chisporroteando, se te empezará a hacer la boca agua.
Ingredientes para 2 raciones
- 2 doradas de ración frescas, limpias, y sin escamas
- 4 patatas grandes
- 1 diente de ajo, cortado en laminas
- 1 cebolla, cortada en rodajas finas
- 1/2 limón
- 2 ramas de romero fresco
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra molida, al gusto
- 1 cucharada de perejil fresco, picado
Indicaciones para hacer la receta
Precalentamos el horno a 220 ºC, y cubrimos una bandeja para el horno con papel vegetal o de aluminio.
Pelamos las patatas, las lavamos y cortamos en rodajas de aproximadamente 1 centímetro de grosor. Disponemos las patatas sobre la bandeja de manera que no se superpongan. Rociamos aceite de oliva sobre las patatas y las espolvoreamos con un poco de sal y pimienta negra.
Lo introducimos en el horno y lo cubrimos con papel de aluminio para que se asen durante 15 minutos.
Mientras tanto, limpiamos el pescado. Lo lavamos bien y secamos con un papel de cocina. Espolvoreamos sal dentro de las doradas y colocamos dentro dos rodajas de limón, unas cuantas láminas de ajo y una ramita de romero. También untamos ambos lados con un poco de aceite de oliva.
Cuando hayan pasado los 15 minutos, sacamos las patatas del horno y ponemos la cebolla en rodajas encima, y si ha sobrado algo de ajo, lo ponemos también.
Colocamos las doradas sobre esta cama de patatas, las sazonamos con sal, y las introducimos en el horno durante 25-30 minutos o hasta que el pescado esté hecho, que será cuando la aleta dorsal se pueda quitar fácilmente.
Si vemos que las doradas se quedan secas durante la cocción, las rociamos con un poco de aceite de oliva. Cuando las doradas estén hechas, las sacamos del horno y espolvoreamos el perejil picado por encima. Podemos servirlas con unas rodajas de limón adicionales.